Luz, camara...

…Stop

Aspiro a entender y aprender a vivir mi vida como si de ver una película se tratara.

Porque al fin y al cabo la vida es eso, una proyección. Una proyección en una gran pantalla finita de tiempo y espacio, construida a base de diámetros y pesos en donde, siempre en “3D”, actuamos este gran largometraje.

Espero mi entendimiento evolucione como un niño que vuelve a mirar una película al crecer. Ya no vive cada pasaje como si de la vida misma se tratara, tampoco es le es indiferente, sino que entiende cada una de sus partes como fundamentales para tener una gran experiencia.

Ya no sufre sobremanera los problemas de los protagonistas, sabe que estos nudos son normales y necesarios para el correcto desarrollo del film, para enriquecer el guion, para alimentar el desenlace. No se le va el alma en cada personaje que desaparece de la historia, entiende que en el bien delineado guion, aportó lo justo y necesario para que la experiencia sea más enriquecedora y profunda. No odia ya al actor que actúa de antagonista, conoce el proceso, el casting esta vez lo puso ahí. En otras muchas historias será extra y quizás protagonista, al final agradece su buen desempeño en el papel, que logra resaltar lo mejor del personaje principal.

Por ultimo después de tanto el final es solo la frutilla del postre, triste o feliz redondea la obra maestra. Entiende aquel que el motivo de la función no es que el héroe mate al dragón y se quede con la princesa, sino que cuando los créditos lleguen, se levante satisfecho sintiendo que nada de lo que estuvo ahí fue en vano.

Si logro mi cometido ya no estaré a merced de la historia sino que la experiencia la hare yo. No ejerceré control alguno sobre los sucesos pero podre permitirme disfrutar del producto total. Si es una comedia, un drama o una de terror será quizás cuestión de enfoque.

Bendiciones y gracias.

… play.